Es inevitable que el término “Guerra Fría” rememore un periodo colmado de tensiones globales, espionaje y rivalidades ideológicas durante el siglo XX, este dejó una marca en la historia de la humanidad y fue el punto de quiebre que determinó las reglas de juego para futuros conflictos armados de gran escala.
Un ejemplo de ello sería la firma de los acuerdos START entre Estados Unidos y Rusia, lo cuales mantuvieron como finalidad prevenir una guerra nuclear a partir de la reducción de armas estratégicas. El último de ellos, conocido como Nuevo START, fue firmado en 2010, por Barack Obama y Dmitri Medvédev, ambos presidentes de Estados Unidos y Rusia. La controversia surge a partir de las declaraciones de Vladímir Putin a inicios del presente año, donde una mala jugada de Biden dentro de la Guerra en Ucrania ocasionó la retirada de Rusia del Tratado. En consecuencia, los constantes errores de la política exterior norteamericana están dando motivos para iniciar una Nueva Guerra Fría, la cual tendrá un mayor impacto en la sociedad mundial que en el siglo pasado. Esto a causa de la aparición de nuevas potencias, como lo es China en el aspecto económico, Corea del Norte con su poderío militar y Rusia, el líder de este nuevo bloque.
Es así, que estamos condenados a una eminente Guerra que se asoma cada vez más debido a las innumerables tensiones que involucran a Estados Unidos con sus principales adversarios, donde la estrategia rusa parte de la alianza con países enemigos de la potencia americana en la región de Medio Oriente, África y Asia. Regiones abarrotadas de recursos naturales que irónicamente son la fuente para la producción de armamento militar y nuclear.
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¿Qué similitudes presenta la Nueva Guerra Fría con la pasada?
Un hecho común, durante la primera Guerra Fría, es la tensión entre potencias políticas, económicas y militares, las cuales fueron desplazadas hacia el tercer mundo, evitando así una colisión armada directa. Actualmente, la Guerra Rusia-Ucrania es ejemplo de ello, el mundo se ha dividido nuevamente en dos bloques, uno liderado por Estados Unidos con el apoyo de la Unión Europea, y el otro, me atrevería a decir, por los BRICS. Una fachada liderada por Moscú y Pekín, para sumar esfuerzos en lo que significaría una guerra por el control total del Sistema Internacional.
¿Se aproxima la Tercera Guerra Mundial?
Esta Nueva Guerra Fría se sitúa en un periodo complejo para Estados Unidos, el cual ha perdido gran credibilidad por parte de la comunidad internacional, en especial por los crímenes cometidos en la invasión a Medio Oriente, la implementación de políticas basadas netamente en sus intereses, el surgimiento de nuevas potencias, la decadencia de las Naciones Unidas, la crisis interna, el dominio ideológico socialista en Latinoamérica y el mundo. Esto ha permitido una ventaja significativa a Rusia, la cual cuenta con una política agresiva caracterizada por un poderío nuclear alto junto con Kim Jong-un, que no dudará en hacer uso de estas armas para cumplir su cometido.
Es así, que la hegemonía estadounidense está en un punto crítico a costa de las malas políticas de los últimos gobiernos, donde la incapacidad de Biden para llevar las riendas del mundo y de su propia nación, permiten un avance más acelerado y desmedido de Rusia y China, en la búsqueda de un nuevo orden mundial a través de la violencia.
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Estudiante de relaciones internacionales